no sé si es que yo y el deporte tenemos algo de odio acomulado o qué. Pero me metí por Yogalates (yoga + pilates) o pilates y se llenó en pocos días. Ok. Drop in classes. Esas de baile, step, coreografías y cosas que trato de evitar. Partí en clases de step con una música del terror, hasta Viva la vida remixado. Toda la clase no siguiendo los pasos, saltando no más y mirando el reloj con sus minutos interminables.
Mi plan era seguir con las clases pero no. Me tenía que resfriar y perder dos semanas valiosas en ejercicio. Si fuera al gimnasio voy a toser tanto al primer paso de step o Latin Cardio, whatever, todos saldrían arrancando mientras yo me ahogo.
Hice el depósito, este destino anti deporte no me la va a ganar. Lo juro.
martes, 16 de febrero de 2010
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